Porque será capítulo 18

Bien, ya estamos aquí, es hora de empezar nuestro plan, tenemos que hallar lo que sea que puede refundir a ese tipo en la presión, espero que podamos hacerlo por Eli, ella no tiene porque estar pasando por todo esto por un gilipollas que no tiene neuronas desde que nació, ella no tiene que estar sufriendo más. Lady y Alan están decididos a buscar lo que sea necesario para que Daniel permanezca alejado de la vida de Eli en todos los sentidos, la está afectando mucho más de lo normal, sin ella tan siquiera a verse acercado a él tanto así, como para provocar que él estuviera haciéndole tanto daño, ellos no encuentran explicación razonable para ese tío le provoque tan insoportable dolor a Eli, ella no se lo merece, ya ha sufrido demasiado en su vida, si esto se va más lejos, no se quieren ni imaginar lo que podría pasar con Eli, pero por eso está allí, para evitar una tragedia más en la vida de Eli, solo esperan que esto funcione y que nada salga mal, están asustados porque no saben con lo que se puedan encontrar en aquel lugar, en la casa de Daniel, pero ya no hay vuelta atrás, a sí que Lady y Alan se arman de valor y deciden cruzar por la puerta...

—¿Estás lista para entrar? —pregunta Alan poniendo su mano alrededor del llavín.

—Eso creo, ¿está abierta la puerta? —pregunta Lady mirando hacia todos lados para ver qué nadie extraño se aproxime.

—Al pasado si, a sí que entremos. —contesta Alan al mismo tiempo que empuja la puerta para que habrá.

—¡Hola!, ¿hay alguien aquí? —pregunta Alan caminado por la casa.

—Al parecer no hay nadie. —dice Lady cruzándome de brazos porque hace frío dentro.

—Si, y al parecer tampoco an limpiado aquí en varios meses. —dice Alan al pasar la mano por una mesa pequeña que estaba cubierta de polvo igual que el piso.

—Si pareciera que aquí no vive nadie, o que la persona que vive aquí está de vacaciones, esta bastante oscuro aquí.

—Es porque no hay luces, a mira, hay una linterna por aquí tirada. —dice Alan al agacharse en lugar donde estaba la linterna. —Lady ven a ver esto.

—¿Que pasa Alan?, ¿qué has encontrado?. —pregunta Lady corriendo hacia el.

—Esto, parece una especie de cerradura, pero está trabada.

—¿qué crees que haya debajo?

—No lo sé, tal vez sea un sótano o algo parecido.

—Veamos si encontramos la llave en alguna parte, tal vez allí halla algo que nos ayude.

—Si tienes razón, vamos. —dice Alan parándose del suelo, pero se detiene al escuchar un ruido extraño. —Espera Lady, escucho algo, creo que viene debajo del lugar. 

—¿Qué? ¿Cómo que algo? —Pregunta Lady asomándose a escuchar también, pero no puede hacerlo porque ven que alguien entra en la casa y se incorpora rápidamente para esconderse junto con Alan. Se toman de la mano y se esconden detrás de una pared que parece llevar a algún pasillo. Se quedan quietos allí observando a la persona que entra. Es Daniel, no tenían pensado que llegaría, a estas horas está trabajando, pero parece que fue a buscar algún objeto que se le había olvidado.

—Alan, ¿Qué escuchaste allí abajo? —le pregunta Lady a Alan susurrando para que Daniel no la escuche.

—Ssh te diré luego. —responde Alan hachando un vistazo a la sala para ver si Daniel se fue. —¡Viene hacia acá! —exclama Alan hachando a Lady hacia atrás para no los vea. Daniel camino hacia el pasillo y siguió de largo sin verles, y ellos aprovecharon para irse antes que les descubriera en su casa. —¡Corre, vámonos! —exclama Alan tomando a Lady rápidamente de la mano y dirigiéndose hacia la puerta de salida, han pasado un susto enorme allí adentro, pero no pasó nada, por el momento no ha a pasado nada. Luego de encontrarse afuera corrieron hacia la segunda calle para alejarse del lugar, se sentaron en banco que había en una cera agitados de tanto correr, cuando respiraron Lady le preguntó otra vez hacer a de lo que pasó dentro de la casa.

—Alan, ¿Qué fue lo que escuchaste allí dentro?

Alan respira profundo y le mira fijamente a los ojos y le contesta muy asustado.

—Lady... Había una persona encerrada allí dentro...

—¿Qué? No puede ser, ¿estás seguro de lo que escuchaste? —le pregunta Lady poniendo una mano en su hombro y mirándole asustada.

—Completamente Lady, cuñado me asomé a escuchar, oí que alguien, gritaba auxilio, pero tuve que poner mucha atención para poder escuchar porque al parecer eso allí abajo estaba muy sedado para que no se escuchase nada, pero tengo muy buen audio, lo que quiero decir es que ese tío tiene a alguien encerrado allí abajo Lady.

—Esto no puede estar pasando, pero ¿pudiste distinguir si era hombre o mujer?

—No muy bien pero la voz sonaba aguda y cansada, creo que era una chica.

—Oh Dio mío, ya lo tenemos, Alan, debemos volver allí, si logramos abrir ese candado, atraparemos a ese, maniático asesino.

—Si tienes razón, pero no podemos hacerlo ahora, porque puede volver, debemos regresar mañana. 

—Alan, puede haber una persona allí encerrada, debemos volver ahora. —insiste Lady, tratando de convencer a Alan para volver.

—Lady, no te pienso poner en riesgo a ti y a Eli, a sí que volveremos mañana en cuanto se valla, te lo prometo.

—Esta bien, pero tenemos que venir inmediatamente se valla.

—Así será Lady, lograremos encerrar a ese maldito, y salvaremos a la persona que está allí. —afirma Alan mientras se para del asiento, para irse a casa con su novia y tranquilizarle. Lady hace lo mismo y le da un abrazo a Alan.

—Prométeme que no dejaremos que le pase nada a mi hermanita Alan. —dice Lady brotando una lagrima por su cara.

—Te lo prometo Lady, nunca dejaremos que le pase nada, nadie le hará daño, no lo permitiremos.

Lady esta dispuesta a hacer lo que sea contar de que su hermana este bien, no sor portaría que le pase algo, y que halla no halla hecho nada para evitarlo, jamás haría algo a si, sabe que ella haría lo mismo, es pequeña ja insensible es la luz de sus ojos, Eli es lo que más quiere en la vida, y ese asesino nunca le podrá hacer daño mientras ella viva, ahora solo tiene que lograr ella pueda dormir, y mientras ese asesino este libre sabe que lo ara, por eso quiere que le encarcelen y lo va a lograr, esta segura, todo contar de volver a traer felicidad a la vida de su hermana, es cuestión de poco tiempo, junto a Alan lograran encarcelar a Daniel, Alan tampoco permitirá que le hagan daño a Eli, ella es toda su vida, jamás permitiría que le pasara algo, ellos lograran liberar a Eli de esta pesadilla en la que se encuentra atrapada.

—Vamos a casa Lady, Eli está sola con tu madre.

—Si vamos, tenemos un día largo mañana.

—Espero que Eli pueda dormir esta noche para que podamos madrugar mañana.

—Seguro que lo hará Lady, y si no lo hace, de igual manera vendremos, te lo aseguro.

—Vale. —dijo Lady convencida de que a sí será.

Alan y Lady van de camino a casa, y están preparados para todo lo que se puedan encontrar mañana, esperan no cometer errores, y salvar la vida de aquella persona que se pueda encontrar allí debajo de aquel sótano. Cuando Lady ya Alan llegan a casa, he han un enorme suspiro de alivio al ver que Eli se encuentra bien, están felices de saber que no le ha pasado nada estando sola. Cuando llegan la encuentran dormida, pero ella los escucha llegar y despierta con una cara muy sonriente al verlos, ya se estaba empezando a aburrir sola.

—¿Dónde estabais chicos? —pregunta Eli al pararse de la cama y darle un enorme beso a Alan.

—Estábamos dando una vuelta por la plaza, salimos para pudieras dormir un poco hermanita.

—Pues si gracias, estaba muy agotada y gracias a Dios logre dormir un poco.

—Menos mal, por lo menos tú has descanso, nosotros estamos agotados. —Dice Alan al tomar a Eli y rodearla con los brazos un darle un beso en la mejilla.

—Bueno, yo veré si está lloviendo afuera chicos, que la pasen bien. —dice Lady retirándose para dejarle solos.

—Bueno, ¿qué te parece si nos acostamos a descansar un rato, hoy ha sido un día muy largo y estoy exhausto. —dice Alan al mismo tiempo que se quita los zapatos y tumba a Eli con el. Alan y Eli se recuestan de lado mira do se fijamente a los ojos y los dos se dicen al mismo tiempo, te amo, ambos sonríen y se besan apasionadamente como si mañana no se volvieran a ver jamás, al final, Eli le abraza y le dice algo a Alan que le desconcierta un poco.

—Alan, ¿todo va estar bien cierto?

Alan sé queda sin palabras al oír esa pregunta de Eli.

—Claro que si Eli, nada te va a pasar, te lo prometo, nunca me voy a separar de tu lado, jamás te dejaré sola, no pienses cosas que te hagan daño por favor, porque no son ciertas, solo son sufragios que llegan a tu mente en modo de atormentarte, pero tú eres más fuerte que ellos, no te dejes vencer por el miedo Eli, asustarle tu a él mi pequeña, tú eres más fuerte. —al terminar Alan de la un fuerte abrazo.

—Gracias Alan, eres lo mejor que me ha pasado en la vida, no sé qué haría sin ti.

Alan y Eli se quedan dormidos abrazados y de dos horas después Eli se despierta con un grito inesperado.

—¡Auxilio! ¡Alguien ayúdeme por favor!...